jueves, 27 de marzo de 2008

Kurt Cobain compró el año pasado una casa.


La viuda de Kurt Cobain, Courtney Love, se habrá querido matar al comprobar que su marido había comprado una casa por valor de 3, 2 millones de dólares el pasado 2007, a pesar de que se suicidó en 1994. Por supuesto, todo era obra de unos estafadores que robaron 69 millones de dólares de la fortuna del ex íder de Nirvana principalmente mediante tarjetas de crédito con identidad falsa.
Fue hace unos días cuando se destapó el fraude sobre la casa del fallecido cantante de rock pero, al parecer, Courtney Love sabía que le estaban robando dinero desde hacía cinco años. "Ha habido un fraude tras otro. Pero nadie me creyó hasta ahora. Comprobé el número de la seguridad social de mi marido y tiene una casa en New Brunswick, New Jersey. La compró el año pasado", según declaraciones de Love al diario Sun recogidas por Otr/press.
Además de la casa, los estafadores abrieron 188 tarjetas de crédito a nombre de la viuda del cantante para extraer dinero de sus cuentas.
Courtney Love perdió el control de sus finanzas, supuestamente a consecuencia de su adicción a las drogas y hace dos años vendió el 25 por ciento del catálogo de Nirvana, del que poseía el 98 por ciento de los derechos. Ahora está convencida de que se trata de uno de los robos de identidad "más grandes de la historia de EE. UU. ".
Además de las cuentas personales de la viuda de Cobain, los ladrones habrían extraído dinero también del fondo personal de la hija de la pareja. Frances Bean, de 14 años.

Un paro y algo màs.




La presidenta Cristina Fernàndez de Kirchner, volvió a dirigirse a los argentinos en medio de la problemática del campo, una vez más sin presentar solución alguna.
Quedaba bien marcada la idea que querían transmitir con bombos y banderas, tratando de recurrir al pasado para tapar el presente.
La presidenta luego de dar vueltas y vueltas sobre diferentes etapas de la Argentina, no decidió cambiar para nada su postura, y dijo: “Levanten el paro, y vamos a dialogar”.
En Parque Norte parecían todos satisfechos, pero a las afueras, principalmente en las rutas con la gente del campo, no se visualizaba la misma satisfacción.
Cristina no presentó ningún cambio con ésta problemática, no hubo solución alguna.
En el campo continúan con el paro, y los pequeños y medianos productores son los más afectados. En la ciudad de a poco el problema se va expandiendo, generando miedo en los comerciantes con los recuerdos de los saqueos y mucho temor en los ciudadanos por la llegada de una inflación, repasando el `89 y el 2001.
El problema parte del gobierno, pero se lo atribuyen al campo, poniéndolo en contra con la ciudad sin pensar en las repercusiones.
Hay medidas que valen la pena, pero hay muchos afectados que no tienen que sufrir sus consecuencias.